miércoles, 27 de abril de 2011

CRONICA DE UNA CADENA DE MALOS ENTENDIDOS

EL MOTIVO DE LA CONSULTA


Julito de 4 años fue derivado a la consulta por la psicóloga de su colegio por “problemas emocionales”. Julito tiene según la psicóloga problemas de adaptación en el colegio, no tiene amigos y juega solo en los recreos.



Sus padres Julio (34) y Elena 32) están muy preocupados porque la maestra de Julito les ha sugerido la posibilidad de que se trate de un trastorno grave de déficit de atención, les ha propuesto que Julito sea llevado a un neurólogo y que probablemente a su criterio tenga que empezar a tomar una medicación.



Sin Embargo la neuróloga ha informado que no se trataría de un trastorno de déficit de atención, sino que coincide con la psicóloga en el diagnóstico acerca de que la falta de atención podría tener su origen en factores emocionales.



La psicóloga decide por lo tanto derivarlos a terapia familiar.



EL CONTEXTO FAMILIAR


Julio y Elena son Bolivianos, provienen de familias acomodadas, se conocieron hace 8 años cuando los dos estudiaban en Estados Unidos una maestría en negocios internacionales.



Elena admiraba el carácter decidido de Julio y a él le gustaba la forma tradicional de ser de ella. Cuando regresaron a su país ambos consiguieron trabajo muy rápidamente y en poco tiempo se transformaron en profesionales muy exitosos. El en una compañía transnacional y ella en un Banco.



Se casaron y meses después, Julio fue ascendido en su trabajo y re-ubicado desde su país a Perú. Por su parte, Elena tuvo que dejar su puesto en el Banco y re-negociar con ellos un puesto y un sueldo menor al que tenía en la agencia de su país.



Al año de vivir en Lima, Elena salió embarazada, unos meses después Julio tuvo graves problemas en su trabajo y se vio forzado a renunciar. Desde ese entonces ellos debieron acomodarse a vivir con el sueldo de Elena, en un país extraño, lejos de sus respectivas familias.



Julio, según Elena, entró en depresión y aunque Elena, como el mismo dice “se arremangó” en cuanto el tema económico, el siente que ella no fue un apoyo moral para él, por el contrario, ella se fue desilusionando de Julio ,todo el tiempo le recriminaba por no salir adelante, sus ideas de formar una empresa propia, le parecían poco realistas, de manera que con el tiempo, la relación se volvió distante y las pocas conversaciones entre ellos generalmente eran sobre dinero y reclamos acerca de cómo Julio no lograba encontrar otro trabajo y sacar adelante a su familia, de la manera en la que tanto Elena como el, en su visión tradicional del matrimonio, siempre esperaron que fuera.



Elena siente que el no se esfuerza lo suficiente y que se está acostumbrando a que ella se encargue de todo. El ha puesto un pequeño negocio, pero no le está yendo bien.
Para ella la relación entre ellos ya no existe, para él, el problema central es el económico, si su negocio mejora, es probable que la situación entre ellos también mejore.



Elena sale muy temprano de casa para ir a trabajar, Julio se queda durmiendo, el lleva al niño al colegio y cuando no puede lo lleva Sara, la nana que esta en la familia desde que Elena era una niña.



Ella piensa que el problema de Julito es de engreimiento, la mamá lo ve muy poco y cuando está con él va de un extremo al otro. O lo súper engríe o lo grita y lo amenaza. El papá es más paciente, le habla lo trata de convencer, pero al final se cansa y las cosas se hacen como quiere el niño.




EL CONTEXTO ESCOLAR




Cuando Julito empezó a ir al nido.


La maestra pensó que era un niñito con algunas dificultades que podían subsanarse a través de un refuerzo en el aprendizaje y terapia física. Así mismo, consideró que los padres debían recibir asesoría con respecto al manejo del niño y al establecimiento de normas. Sin embargo los reportes del desempeño de Julito, no dan cuenta de estas dificultades y sólo tienen frases halagadoras sobre su desempeño. La directora del Nido piensa que es importante que los padres no se desalienten con respecto a los niños y siempre sugiere a las maestras no poner nada “negativo” en sus informes. Como las dificultades del niño nunca fueron comentadas abiertamente en el nido, los padres tenían la idea de que todo estaba bien.



Julito postuló a un colegio Inglés, la mayor parte de la población del mismo son extranjeros o personas de una posición económica alta, la mayoría de las madres no trabajan. Los padres hacen un gran esfuerzo económico para ponerlo en este colegio, los padres de Elena los ayudan al respecto. Julito postuló dos veces y finalmente fue aceptado, los niños de su clase son en su mayoría bilingües, para Julito es la primera vez que estudia en inglés, los otros niños se conocen desde el nido, hacen grupos para jugar en el recreo y el es el “niño nuevo” que no habla inglés. Generalmente jugaba solo en el recreo y no le gusta quedarse en el colegio. Tres meses después de iniciadas las clases, la maestra del niño solicitó que sea enviado a una evaluación neurológica pues según ella se trataba de un caso severo de déficit de atención. Julito no logra escribir su nombre sin ayuda, sus dibujos son rudimentarios, no sigue instrucciones básicas como por ejemplo cerrar la llave del agua después de lavarse las manos. No le gusta escuchar los cuentos en inglés y no logra explicar en inglés lo que se le pregunta con respecto a los personajes de los cuentos.



Los padres fueron donde la neuróloga en su informe ella señala que se trataba de “laxitud de ligamentos sin debilidad” la falta de atención podría tener un origen en factores emocionales y sugiere terapia especializada y un cambio de actitud en casa, para que el niño logre ser más independiente...



La psicóloga del colegio piensa que se trata de un problema emocional y familiar., El niño permanece aislado en el recreo , no parece estar disfrutando el colegio y se muestra apático y poco motivado en las clases, además, ella ha observado que quien lleva al niño al colegio es la “nana”, muy de vez en cuando lo trae el papá. La mamá a pesar de su trabajo ha participado como mamá voluntaria en las clases, leyendo cuentos y ayudando con la merienda de los niños. El papá también ha participado en estas actividades. En esas fechas el ha estado más alegre y motivado.



Es la psicóloga quien decide que sería útil derivarlos a Terapia Familiar.




LA TERAPIA FAMILIAR


La madre impresiona como la líder de la familia ella contesta la mayoría de las preguntas y cuando el esposo habla, ella corrige o amplía lo que el dice. Cuando ella habla, el la escucha en silencio. Algo similar sucede con Julito, ella lo insta a contestar, le dice como dibujar, que color debería usar, etc.



Cuando ella lo intenta corregir, el se refugia en sus faldas y actúa como si fuera un niño menor, los padres acceden a todos sus deseos y les resulta muy difícil ponerle límites simples en la sesión, como lograr que el niño espere mientras ellos hablan, o que conteste algo que ellos le preguntan. Busca tener la total atención de los padres y ellos se la dan todo el tiempo.
El se comporta como un niño engreído y más pequeño, incluso por momentos habla como un bebe.



El clima entre los esposos es de mucha tensión se dirigen el uno al otro con una falsa amabilidad que deja traslucir el conflicto entre ellos. Señalan que ellos nunca discuten delante del niño y que cuando lo hacen, lo hacen en Inglés para que el no los entienda.
Están en la consulta porque los envió el colegio y porque les preocupa que Julito no se adapte en su colegio y desean descartar si es un problema emocional, pues a ellos no les gustaría que se trate de un déficit de atención y el niño tenga que tomar medicinas más adelante.




REUNIÓN EN EL COLEGIO
Después de la primera entrevista con Julito y sus padres, se lleva a cabo una reunión en el colegio. A esta asisten la psicóloga que derivó el caso, la maestra de Julito y la terapeuta familiar
Ellas explican acerca de su preocupación para con Julito. La maestra señala que aunque todos piensan que aún es muy pronto para el diagnóstico es un caso muy grave de Déficit de atención, el peor caso que ella ha visto a lo largo de toda su carrera.



Incluso menciona que tal vez los padres deberían empezar a pensar en llevarse al niño a otro colegio, con un sistema menos exigente que el que tiene el colegio en el que se encuentra actualmente.



Su actitud resulta una sorpresa para la psicóloga quien intenta convencerla de atenerse a lo propuesto por la neuróloga (quien es la “experta”).


Igualmente solicita que la terapeuta familiar (otra “experta”) hable de los problemas emocionales, que según ella explican la conducta de Julito.



Se explican las dificultades para poner reglas y límites entre los padres y la necesidad de que la escuela, coordine con la casa.



Se acuerda estar en contacto para trabajar juntas por el bienestar de Julito.



La maestra no se muestra muy dispuesta a colaborar, pero accede a dar una oportunidad, dado que ya sea que Julito se quede o se vaya del colegio, acordar con los padres los objetivos comunes en cuanto a las reglas y los límites lo ayudará en esta escuela y en cualquier otra.




La maestra solicita que al reiniciar el año escolar el colegio exige una nueva evaluación esta vez de un “experto” en aprendizaje.



Además de un breve informe sobre la situación familiar, los desacuerdos entre los padres sobre los límites y la necesidad de una mejor coordinación con la escuela. La maestra sostiene que la madre trabaja todo el día y que no cree que se pueda hacer coordinaciones con ella. Sin embargo la psicóloga explica que a pesar de su trabajo recargado, ha participado varias veces en la clase leyendo cuentos a los niños. Ella está muy preocupada por la situación de Julito y desea hacer todo lo posible para que el mejore.



La maestra no se muestra muy convencida dice que se trata de una mama “que no acepta” la dificultad del niño, y que para ella se trata de un caso perdido.



Dos meses después la maestra reporta que si bien la situación académica de Julito no ha mejorado demasiado, su vida social se ha ampliado, tiene dos amigos y ya no se queda jugando solo en el recreo. Su inglés ha mejorado un poco.



La madre se acerca regularmente al colegio para informarse de sus progresos, la maestra considera que se trata de una madre muy ansiosa. La madre considera que la maestra no “ha sabido ganarse a Julito”, pues todas las cosas que ella le pide hacer y no hace, como escribir su nombre, pintar , recortar etc., las hace contento cuando trabaja con la psicóloga de aprendizaje.
La situación en casa de Julito ha mejorado un poco también, los padres ya no discuten delante de él, aunque la tensión que hay entre ellos persiste. La madre quisiera “tener el valor” para divorciarse de un hombre al que ya no admira, que pasa la mayor parte del día acostado en su cama o viendo televisión, ella se pregunta ¿qué clase de imagen de padre esta teniendo Julito?
Julito dice que al comienzo no le gustaba su colegio, pero que ahora que tiene algunos amigos si le gusta, la maestra es buena y mala, a veces tiene paciencia y otras no. Lo mismo pasa con sus padres, a veces, discuten y otras veces están tranquilos. A él no le gusta que discutan, generalmente lo hacen en Inglés, pero ahora el entiende todo lo que dicen y dicen cosas bien feas.
Por su parte el padre considera que el problema se resolvería si el empezará a ganar más dinero con su empresa, esta seguro que Elena se relajaría, ya no tendría la presión sobre el dinero, y todo sería como antes.



Sin embargo Elena considera que ya la relación de pareja no tiene remedio y que más bien su interés fundamental es llevarse bien con Julio como padres. Ella se describe a si misma como una persona muy religiosa y bajo esos principios, ella no quiere divorciarse.



Las veces que ha intentado hablar con Julio sobre el tema. El le ha dicho que ellos ya viven como separados, pues no hay vida en común entre ellos y que pueden seguir haciendo el esfuerzo de ser buenos padres por los niños, pues el no quiere que crezcan en un hogar de divorciados.


Se ha propuesto que como ambos están de acuerdo en que la separación no se llevará a cabo por ahora, intenten hacer algunos cambios importantes, para hacer la relación más llevadera.



Julio se hará cargo del tema del colegio y la coordinación de las reglas comunes y mantendrá informada a Elena, se encargará también de que ella tenga un tiempo libre cuando llega a casa cansada del trabajo.



LA SITUACIÓN ACTUAL


Desde todos los ángulos la situación de Julito aparece atrapada en una serie de malos entendidos.



No existe aún un diagnóstico claro y definitivo. La neuróloga recomienda re-evaluarlo en un tiempo. Las dificultades académicas persisten desde el nido, han mejorado ligeramente, probablemente gracias a la maduración natural del niño y a las distintas ayudas tanto dentro como fuera del colegio que viene recibiendo.



En casa tan poco es claro, qué sucederá entre los padres, aunque hay un clima tenso, sostenido entre ellos desde hace tiempo, la madre ha sido muy clara con respecto a que el divorcio no es una opción para ellos. ¿Todo se solucionaría si los ingresos del padre mejoran?
Entre tanto. ¿Cuáles son los elementos que desde la escuela pueden ayudar a Julito creando una situación más estable y armónica emocionalmente?



¿Podrá la maestra creer en las potencialidades de Julito, o se ha transformado esto en una situación donde cualquier progreso es admitir que se ha equivocado? ¿Qué sucede actualmente en la relación entre la maestra y la madre, que aparece deteriorada? ¿la posición de la psicóloga no es clara tampoco, su rol de mediadora, de puente entre colegio y escuela, resulta fragilizado por un último evento. Su asistente, comentó con una mamá del colegio acerca de que la maestra considera a Julito un caso perdido, esta mamá a su vez le hizo un comentario a Elena. Le dijo también que se había hablado de sus dificultades con el esposo. Es decir, la asistenta había comentado sobre el acta confidencial de la reunión, supuestamente guardada por la psicóloga, con lo cuál, las dudas de los padres acerca del futuro del niño en ese colegio y la actitud de la maestra han colaborado a crear más confusión.




Para ayudar a Julito es claro que como señala Baeza, 2006.



Es necesario encontrar nuevas vías de enfoque pues los marcos de referencia tradicionales resultan inadecuados. Un marco de referencia individualista-dualista (verdadero-falso) es incapaz de desarrollar nuevos conocimientos para enfrentar y resolver problemas de alta complejidad.




La primera reunión conjunta con la maestra, la psicóloga, y la terapeuta familiar, no tuvo mucho éxito. La maestra no parecía querer dar su brazo a torcer y tal vez se sintió en la necesidad de defender su punto de vista. No se logró construir un dialogo colaborativo, por el contrario, ella dejó muy en claro su idea acerca de que el niño debía ser retirado de la escuela


Ella sostiene estar disponible para ayudar a Julito, como ayuda a todos los niños de su clase, más ella de antemano quiere dejar en claro, que ella ya vio y vivió muchas cosas en su larga experiencia como maestra y el caso de Julito es grave.



La terapeuta propone darle un tiempo a Julito. Observar algunas de sus fortalezas de manera que si finalmente se le cambia de colegio la siguiente maestra se beneficie y por su puesto Julito también con las observaciones de una maestra con experiencia de lo que si puede hacer o lograr el niño, lo que no puede hacer será de seguro evidente para la siguiente maestra.


Esto parece interesarle un poco a la maestra y ofrece que observará a “ver si hay algo”.
Los padres se encuentran enojados por la infidencia de la asistenta de la Psicóloga, las disculpas ofrecidas, con justa razón no han sido suficientes.



La pregunta que surge desde los padres es si talvez, lo más conveniente será retirar a Julito de ese colegio, no porque sea un caso perdido sino por todos los malos entendidos, o apostar por irlos arreglando poco a poco.




No dejemos de lado los progresos adquiridos, su vida social y su inclusión en un pequeño círculo de amigos.




Si tenemos en cuenta que el paradigma interaccionista de la inteligencia entiende que la conducta del sujeto sobre el medio ambiente le permite generar sistemas de organización en relación con otros en un contexto consensual (Baeza, S. 2005)



Resultan de suma importancia estos logros de Julito, ellos son la señal de que a pesar de todo, y sin darse demasiada cuenta, los sistemas involucrados se encuentra haciendo esfuerzos conjuntos. Sin embargo cómo hacerlos visibles para su maestra.



Es en la interacción docente-alumno, alumno-alumno que se desarrolla el significado, se validan y completan estructuras complejas de conocimiento ……………



Es el docente quien provee una estructura tentativa de conocimiento,…….Se trata de un conocimiento negociado entre alumnos- docente que se produce y efectiviza en la interacción (Baeza, S.2005).




En la situación de Julito, se intersecan situaciones que nos remiten al paradigma de la complejidad y a los planteamientos de Brofenbrenner (1987) donde la familia (el microsistema) se relaciona con el exosistema, representado por la escuela y estos a su vez son parte de un macrosistema donde se ubicarían las creencias y los valores culturales que proponen los roles tradicionales de hombre (que trabaja, aporta, protege, defiende) mujer (encargada de los niños, su trabajo es secundario, etc) y que representan una forma de vivir y estar en el mundo, que resulta disonante teniendo en cuenta la situación socio-económica de la familia de Julito en la actualidad.




Tenemos entonces, estas esferas de mutua-influencia:


• Un diagnóstico indeterminado desde el punto de vista de la maestra y la psicóloga.
• Un colegio que exige un gran esfuerzo económico de parte de esta familia. Que los regresa al mundo social en que vivían en los buenos tiempos.
• Una maestra que confía en su experiencia y basada en ella tiene ideas pre-concebidas sobre el futuro desempeño del niño.
• Una madre que trabaja y sostiene el hogar y un padre que depende económicamente de la madre. Situación que ambos consideran “no natural”
• Unos padres que definen su relación de pareja como terminada, pero que a la vez, están de acuerdo que no se separarán.
• Una situación de infidencia desafortunada, que trae más desconfianza a los padres sobre las intenciones de la maestra y de la Psicóloga sobre la permanencia del niño en el colegio.
• Una terapeuta que intenta ser un nexo entre estos sistemas. Cuenta con la desconfianza de la maestra y el apoyo de la Psicóloga.
• La migración y el cambio de status socio-económico que implica un reto de adaptación para toda la familia y para cada uno de sus integrantes.
• Las expectativas en juego: Los estereotipos con los que llegaron al matrimonio, los cambios en cuanto al trabajo del esposo, el colegio que se vuelve una fuente de rechazo para el niño y sus padres. Las expectativas de los profesionales que participan en este caso.



Kñallisnky (1999) señala como la falta de comunicación y comprensión entre la escuela y la familia es frecuentemente la razón fundamental de la mala adaptación de los alumnos. Para esta autora es deber de la escuela construir una relación de comunicación con las familias, esta comunicación se construye alrededor de compartir, conocer y construir objetivos comunes entre ambos sistemas.



Macbeth (1995) citada por Kñallinsky, propone más bien que los objetivos de las dos partes (familia/escuela) no tienen porque ser los mismos, se trataría más bien de “reunir diferencias y complementar las contribuciones”.



Esta propuesta de Macbeth, nos ayuda a buscar un espacio de encuentro, que deberá tener lugar entre la maestra, la psicóloga, la terapeuta familiar, los padres, la nana y Julito. Donde sean visibles los progresos del niño y los esfuerzos de cada una de las partes involucradas en los mismos.



Se trataría , cómo señala Dabas (2000) ampliar nuestra visón , donde el accionar de cada uno enriquezca al conjunto y este a cada uno de los integrantes.
Un trabajo y un esfuerzo de visualizar los componentes de la red que podría ayudar a centrar los esfuerzos hacia las fortalezas del niño de manera que, como propone Kñallisnky (1999)
La familia y escuela presenten lazos de continuidad, ambas aporten una respuesta a las necesidades fundamentales del niño, ambas contribuyen al desarrollo de su identidad y a su socialización. Pero cada una debe hacerlo desde la toma de conciencia de sus roles específicos y complementarios.




BIBLIOGRAFIA


BAEZA , S (2005) Funcionamiento y clima socio-relacional del aula. Una perspectiva sistémica. Buenos Aires. Ed Aprendizaje hoy
BAEZA, S (2006) El imprescindible puente familia-escuela: Estrategias E intervenciones psicopedagógicas. Buenos Aires. Ed. Aprendizaje hoy
BROFENBRENNER, U (1987) La ecología del desarrollo humano. Barcelona, Paidos.
DABAS, E (2000) “Red social , sistema familiar y aprendizaje” en Tratamiento Psicopedagógico. Red interinstitucional en el ámbito de la salud. Buenos Aires. Ed Paidos.
KÑALINSKY, E (1999) La participación educativa : Familia y escuela. Zaragoza. Servicio de publicaciones y producción documental de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.


EL MOTIVO DE LA CONSULTA


Julito de 4 años fue derivado a la consulta por la psicóloga de su colegio por “problemas emocionales”. Julito tiene según la psicóloga problemas de adaptación en el colegio, no tiene amigos y juega solo en los recreos.
Sus padres Julio (34) y Elena 32) están muy preocupados porque la maestra de Julito les ha sugerido la posibilidad de que se trate de un trastorno grave de déficit de atención, les ha propuesto que Julito sea llevado a un neurólogo y que probablemente a su criterio tenga que empezar a tomar una medicación.
Sin Embargo la neuróloga ha informado que no se trataría de un trastorno de déficit de atención, sino que coincide con la psicóloga en el diagnóstico acerca de que la falta de atención podría tener su origen en factores emocionales.
La psicóloga decide por lo tanto derivarlos a terapia familiar.



EL CONTEXTO FAMILIAR


Julio y Elena son Bolivianos, provienen de familias acomodadas, se conocieron hace 8 años cuando los dos estudiaban en Estados Unidos una maestría en negocios internacionales.
Elena admiraba el carácter decidido de Julio y a él le gustaba la forma tradicional de ser de ella. Cuando regresaron a su país ambos consiguieron trabajo muy rápidamente y en poco tiempo se transformaron en profesionales muy exitosos. El en una compañía transnacional y ella en un Banco.
Se casaron y meses después, Julio fue ascendido en su trabajo y re-ubicado desde su país a Perú. Por su parte, Elena tuvo que dejar su puesto en el Banco y re-negociar con ellos un puesto y un sueldo menor al que tenía en la agencia de su país.
Al año de vivir en Lima, Elena salió embarazada, unos meses después Julio tuvo graves problemas en su trabajo y se vio forzado a renunciar. Desde ese entonces ellos debieron acomodarse a vivir con el sueldo de Elena, en un país extraño, lejos de sus respectivas familias.
Julio, según Elena, entró en depresión y aunque Elena, como el mismo dice “se arremangó” en cuanto el tema económico, el siente que ella no fue un apoyo moral para él, por el contrario, ella se fue desilusionando de Julio ,todo el tiempo le recriminaba por no salir adelante, sus ideas de formar una empresa propia, le parecían poco realistas, de manera que con el tiempo, la relación se volvió distante y las pocas conversaciones entre ellos generalmente eran sobre dinero y reclamos acerca de cómo Julio no lograba encontrar otro trabajo y sacar adelante a su familia, de la manera en la que tanto Elena como el, en su visión tradicional del matrimonio, siempre esperaron que fuera.
Elena siente que el no se esfuerza lo suficiente y que se está acostumbrando a que ella se encargue de todo. El ha puesto un pequeño negocio, pero no le está yendo bien.
Para ella la relación entre ellos ya no existe, para él, el problema central es el económico, si su negocio mejora, es probable que la situación entre ellos también mejore.
Elena sale muy temprano de casa para ir a trabajar, Julio se queda durmiendo, el lleva al niño al colegio y cuando no puede lo lleva Sara, la nana que esta en la familia desde que Elena era una niña.
Ella piensa que el problema de Julito es de engreimiento, la mamá lo ve muy poco y cuando está con él va de un extremo al otro. O lo súper engríe o lo grita y lo amenaza. El papá es más paciente, le habla lo trata de convencer, pero al final se cansa y las cosas se hacen como quiere el niño.


EL CONTEXTO ESCOLAR


Cuando Julito empezó a ir al nido.
La maestra pensó que era un niñito con algunas dificultades que podían subsanarse a través de un refuerzo en el aprendizaje y terapia física. Así mismo, consideró que los padres debían recibir asesoría con respecto al manejo del niño y al establecimiento de normas. Sin embargo los reportes del desempeño de Julito, no dan cuenta de estas dificultades y sólo tienen frases halagadoras sobre su desempeño. La directora del Nido piensa que es importante que los padres no se desalienten con respecto a los niños y siempre sugiere a las maestras no poner nada “negativo” en sus informes. Como las dificultades del niño nunca fueron comentadas abiertamente en el nido, los padres tenían la idea de que todo estaba bien.
Julito postuló a un colegio Inglés, la mayor parte de la población del mismo son extranjeros o personas de una posición económica alta, la mayoría de las madres no trabajan. Los padres hacen un gran esfuerzo económico para ponerlo en este colegio, los padres de Elena los ayudan al respecto. Julito postuló dos veces y finalmente fue aceptado, los niños de su clase son en su mayoría bilingües, para Julito es la primera vez que estudia en inglés, los otros niños se conocen desde el nido, hacen grupos para jugar en el recreo y el es el “niño nuevo” que no habla inglés. Generalmente jugaba solo en el recreo y no le gusta quedarse en el colegio. Tres meses después de iniciadas las clases, la maestra del niño solicitó que sea enviado a una evaluación neurológica pues según ella se trataba de un caso severo de déficit de atención. Julito no logra escribir su nombre sin ayuda, sus dibujos son rudimentarios, no sigue instrucciones básicas como por ejemplo cerrar la llave del agua después de lavarse las manos. No le gusta escuchar los cuentos en inglés y no logra explicar en inglés lo que se le pregunta con respecto a los personajes de los cuentos.
Los padres fueron donde la neuróloga en su informe ella señala que se trataba de “laxitud de ligamentos sin debilidad” la falta de atención podría tener un origen en factores emocionales y sugiere terapia especializada y un cambio de actitud en casa, para que el niño logre ser más independiente...
La psicóloga del colegio piensa que se trata de un problema emocional y familiar., El niño permanece aislado en el recreo , no parece estar disfrutando el colegio y se muestra apático y poco motivado en las clases, además, ella ha observado que quien lleva al niño al colegio es la “nana”, muy de vez en cuando lo trae el papá. La mamá a pesar de su trabajo ha participado como mamá voluntaria en las clases, leyendo cuentos y ayudando con la merienda de los niños. El papá también ha participado en estas actividades. En esas fechas el ha estado más alegre y motivado.
Es la psicóloga quien decide que sería útil derivarlos a Terapia Familiar.


LA TERAPIA FAMILIAR


La madre impresiona como la líder de la familia ella contesta la mayoría de las preguntas y cuando el esposo habla, ella corrige o amplía lo que el dice. Cuando ella habla, el la escucha en silencio. Algo similar sucede con Julito, ella lo insta a contestar, le dice como dibujar, que color debería usar, etc.
Cuando ella lo intenta corregir, el se refugia en sus faldas y actúa como si fuera un niño menor, los padres acceden a todos sus deseos y les resulta muy difícil ponerle límites simples en la sesión, como lograr que el niño espere mientras ellos hablan, o que conteste algo que ellos le preguntan. Busca tener la total atención de los padres y ellos se la dan todo el tiempo.
El se comporta como un niño engreído y más pequeño, incluso por momentos habla como un bebe.
El clima entre los esposos es de mucha tensión se dirigen el uno al otro con una falsa amabilidad que deja traslucir el conflicto entre ellos. Señalan que ellos nunca discuten delante del niño y que cuando lo hacen, lo hacen en Inglés para que el no los entienda.
Están en la consulta porque los envió el colegio y porque les preocupa que Julito no se adapte en su colegio y desean descartar si es un problema emocional, pues a ellos no les gustaría que se trate de un déficit de atención y el niño tenga que tomar medicinas más adelante.


REUNIÓN EN EL COLEGIO
Después de la primera entrevista con Julito y sus padres, se lleva a cabo una reunión en el colegio. A esta asisten la psicóloga que derivó el caso, la maestra de Julito y la terapeuta familiar
Ellas explican acerca de su preocupación para con Julito. La maestra señala que aunque todos piensan que aún es muy pronto para el diagnóstico es un caso muy grave de Déficit de atención, el peor caso que ella ha visto a lo largo de toda su carrera.
Incluso menciona que tal vez los padres deberían empezar a pensar en llevarse al niño a otro colegio, con un sistema menos exigente que el que tiene el colegio en el que se encuentra actualmente.
Su actitud resulta una sorpresa para la psicóloga quien intenta convencerla de atenerse a lo propuesto por la neuróloga (quien es la “experta”).
Igualmente solicita que la terapeuta familiar (otra “experta”) hable de los problemas emocionales, que según ella explican la conducta de Julito.
Se explican las dificultades para poner reglas y límites entre los padres y la necesidad de que la escuela, coordine con la casa.
Se acuerda estar en contacto para trabajar juntas por el bienestar de Julito.
La maestra no se muestra muy dispuesta a colaborar, pero accede a dar una oportunidad, dado que ya sea que Julito se quede o se vaya del colegio, acordar con los padres los objetivos comunes en cuanto a las reglas y los límites lo ayudará en esta escuela y en cualquier otra.


La maestra solicita que al reiniciar el año escolar el colegio exige una nueva evaluación esta vez de un “experto” en aprendizaje.
Además de un breve informe sobre la situación familiar, los desacuerdos entre los padres sobre los límites y la necesidad de una mejor coordinación con la escuela. La maestra sostiene que la madre trabaja todo el día y que no cree que se pueda hacer coordinaciones con ella. Sin embargo la psicóloga explica que a pesar de su trabajo recargado, ha participado varias veces en la clase leyendo cuentos a los niños. Ella está muy preocupada por la situación de Julito y desea hacer todo lo posible para que el mejore.
La maestra no se muestra muy convencida dice que se trata de una mama “que no acepta” la dificultad del niño, y que para ella se trata de un caso perdido.



Dos meses después la maestra reporta que si bien la situación académica de Julito no ha mejorado demasiado, su vida social se ha ampliado, tiene dos amigos y ya no se queda jugando solo en el recreo. Su inglés ha mejorado un poco.
La madre se acerca regularmente al colegio para informarse de sus progresos, la maestra considera que se trata de una madre muy ansiosa. La madre considera que la maestra no “ha sabido ganarse a Julito”, pues todas las cosas que ella le pide hacer y no hace, como escribir su nombre, pintar , recortar etc., las hace contento cuando trabaja con la psicóloga de aprendizaje.
La situación en casa de Julito ha mejorado un poco también, los padres ya no discuten delante de él, aunque la tensión que hay entre ellos persiste. La madre quisiera “tener el valor” para divorciarse de un hombre al que ya no admira, que pasa la mayor parte del día acostado en su cama o viendo televisión, ella se pregunta ¿qué clase de imagen de padre esta teniendo Julito?
Julito dice que al comienzo no le gustaba su colegio, pero que ahora que tiene algunos amigos si le gusta, la maestra es buena y mala, a veces tiene paciencia y otras no. Lo mismo pasa con sus padres, a veces, discuten y otras veces están tranquilos. A él no le gusta que discutan, generalmente lo hacen en Inglés, pero ahora el entiende todo lo que dicen y dicen cosas bien feas.
Por su parte el padre considera que el problema se resolvería si el empezará a ganar más dinero con su empresa, esta seguro que Elena se relajaría, ya no tendría la presión sobre el dinero, y todo sería como antes.
Sin embargo Elena considera que ya la relación de pareja no tiene remedio y que más bien su interés fundamental es llevarse bien con Julio como padres. Ella se describe a si misma como una persona muy religiosa y bajo esos principios, ella no quiere divorciarse.
Las veces que ha intentado hablar con Julio sobre el tema. El le ha dicho que ellos ya viven como separados, pues no hay vida en común entre ellos y que pueden seguir haciendo el esfuerzo de ser buenos padres por los niños, pues el no quiere que crezcan en un hogar de divorciados.
Se ha propuesto que como ambos están de acuerdo en que la separación no se llevará a cabo por ahora, intenten hacer algunos cambios importantes, para hacer la relación más llevadera.
Julio se hará cargo del tema del colegio y la coordinación de las reglas comunes y mantendrá informada a Elena, se encargará también de que ella tenga un tiempo libre cuando llega a casa cansada del trabajo.



LA SITUACIÓN ACTUAL


Desde todos los ángulos la situación de Julito aparece atrapada en una serie de malos entendidos.
No existe aún un diagnóstico claro y definitivo. La neuróloga recomienda re-evaluarlo en un tiempo. Las dificultades académicas persisten desde el nido, han mejorado ligeramente, probablemente gracias a la maduración natural del niño y a las distintas ayudas tanto dentro como fuera del colegio que viene recibiendo.
En casa tan poco es claro, qué sucederá entre los padres, aunque hay un clima tenso, sostenido entre ellos desde hace tiempo, la madre ha sido muy clara con respecto a que el divorcio no es una opción para ellos. ¿Todo se solucionaría si los ingresos del padre mejoran?
Entre tanto. ¿Cuáles son los elementos que desde la escuela pueden ayudar a Julito creando una situación más estable y armónica emocionalmente?
¿Podrá la maestra creer en las potencialidades de Julito, o se ha transformado esto en una situación donde cualquier progreso es admitir que se ha equivocado? ¿Qué sucede actualmente en la relación entre la maestra y la madre, que aparece deteriorada? ¿la posición de la psicóloga no es clara tampoco, su rol de mediadora, de puente entre colegio y escuela, resulta fragilizado por un último evento. Su asistente, comentó con una mamá del colegio acerca de que la maestra considera a Julito un caso perdido, esta mamá a su vez le hizo un comentario a Elena. Le dijo también que se había hablado de sus dificultades con el esposo. Es decir, la asistenta había comentado sobre el acta confidencial de la reunión, supuestamente guardada por la psicóloga, con lo cuál, las dudas de los padres acerca del futuro del niño en ese colegio y la actitud de la maestra han colaborado a crear más confusión.


Para ayudar a Julito es claro que como señala Baeza, 2006.
Es necesario encontrar nuevas vías de enfoque pues los marcos de referencia tradicionales resultan inadecuados. Un marco de referencia individualista-dualista (verdadero-falso) es incapaz de desarrollar nuevos conocimientos para enfrentar y resolver problemas de alta complejidad.


La primera reunión conjunta con la maestra, la psicóloga, y la terapeuta familiar, no tuvo mucho éxito. La maestra no parecía querer dar su brazo a torcer y tal vez se sintió en la necesidad de defender su punto de vista. No se logró construir un dialogo colaborativo, por el contrario, ella dejó muy en claro su idea acerca de que el niño debía ser retirado de la escuela


Ella sostiene estar disponible para ayudar a Julito, como ayuda a todos los niños de su clase, más ella de antemano quiere dejar en claro, que ella ya vio y vivió muchas cosas en su larga experiencia como maestra y el caso de Julito es grave.
La terapeuta propone darle un tiempo a Julito. Observar algunas de sus fortalezas de manera que si finalmente se le cambia de colegio la siguiente maestra se beneficie y por su puesto Julito también con las observaciones de una maestra con experiencia de lo que si puede hacer o lograr el niño, lo que no puede hacer será de seguro evidente para la siguiente maestra.
Esto parece interesarle un poco a la maestra y ofrece que observará a “ver si hay algo”.
Los padres se encuentran enojados por la infidencia de la asistenta de la Psicóloga, las disculpas ofrecidas, con justa razón no han sido suficientes.
La pregunta que surge desde los padres es si talvez, lo más conveniente será retirar a Julito de ese colegio, no porque sea un caso perdido sino por todos los malos entendidos, o apostar por irlos arreglando poco a poco.


No dejemos de lado los progresos adquiridos, su vida social y su inclusión en un pequeño círculo de amigos.


Si tenemos en cuenta que el paradigma interaccionista de la inteligencia entiende que la conducta del sujeto sobre el medio ambiente le permite generar sistemas de organización en relación con otros en un contexto consensual (Baeza, S. 2005)
Resultan de suma importancia estos logros de Julito, ellos son la señal de que a pesar de todo, y sin darse demasiada cuenta, los sistemas involucrados se encuentra haciendo esfuerzos conjuntos. Sin embargo cómo hacerlos visibles para su maestra.
Es en la interacción docente-alumno, alumno-alumno que se desarrolla el significado, se validan y completan estructuras complejas de conocimiento ……………
Es el docente quien provee una estructura tentativa de conocimiento,…….Se trata de un conocimiento negociado entre alumnos- docente que se produce y efectiviza en la interacción (Baeza, S.2005).


En la situación de Julito, se intersecan situaciones que nos remiten al paradigma de la complejidad y a los planteamientos de Brofenbrenner (1987) donde la familia (el microsistema) se relaciona con el exosistema, representado por la escuela y estos a su vez son parte de un macrosistema donde se ubicarían las creencias y los valores culturales que proponen los roles tradicionales de hombre (que trabaja, aporta, protege, defiende) mujer (encargada de los niños, su trabajo es secundario, etc) y que representan una forma de vivir y estar en el mundo, que resulta disonante teniendo en cuenta la situación socio-económica de la familia de Julito en la actualidad.


Tenemos entonces, estas esferas de mutua-influencia:


• Un diagnóstico indeterminado desde el punto de vista de la maestra y la psicóloga.
• Un colegio que exige un gran esfuerzo económico de parte de esta familia. Que los regresa al mundo social en que vivían en los buenos tiempos.
• Una maestra que confía en su experiencia y basada en ella tiene ideas pre-concebidas sobre el futuro desempeño del niño.
• Una madre que trabaja y sostiene el hogar y un padre que depende económicamente de la madre. Situación que ambos consideran “no natural”
• Unos padres que definen su relación de pareja como terminada, pero que a la vez, están de acuerdo que no se separarán.
• Una situación de infidencia desafortunada, que trae más desconfianza a los padres sobre las intenciones de la maestra y de la Psicóloga sobre la permanencia del niño en el colegio.
• Una terapeuta que intenta ser un nexo entre estos sistemas. Cuenta con la desconfianza de la maestra y el apoyo de la Psicóloga.
• La migración y el cambio de status socio-económico que implica un reto de adaptación para toda la familia y para cada uno de sus integrantes.
• Las expectativas en juego: Los estereotipos con los que llegaron al matrimonio, los cambios en cuanto al trabajo del esposo, el colegio que se vuelve una fuente de rechazo para el niño y sus padres. Las expectativas de los profesionales que participan en este caso.



Kñallisnky (1999) señala como la falta de comunicación y comprensión entre la escuela y la familia es frecuentemente la razón fundamental de la mala adaptación de los alumnos. Para esta autora es deber de la escuela construir una relación de comunicación con las familias, esta comunicación se construye alrededor de compartir, conocer y construir objetivos comunes entre ambos sistemas.
Macbeth (1995) citada por Kñallinsky, propone más bien que los objetivos de las dos partes (familia/escuela) no tienen porque ser los mismos, se trataría más bien de “reunir diferencias y complementar las contribuciones”.
Esta propuesta de Macbeth, nos ayuda a buscar un espacio de encuentro, que deberá tener lugar entre la maestra, la psicóloga, la terapeuta familiar, los padres, la nana y Julito. Donde sean visibles los progresos del niño y los esfuerzos de cada una de las partes involucradas en los mismos.
Se trataría , cómo señala Dabas (2000) ampliar nuestra visón , donde el accionar de cada uno enriquezca al conjunto y este a cada uno de los integrantes.
Un trabajo y un esfuerzo de visualizar los componentes de la red que podría ayudar a centrar los esfuerzos hacia las fortalezas del niño
de manera que, como propone Kñallisnky (1999)
La familia y escuela presenten lazos de continuidad, ambas aporten una respuesta a las necesidades fundamentales del niño, ambas contribuyen al desarrollo de su identidad y a su socialización. Pero cada una debe hacerlo desde la toma de conciencia de sus roles específicos y complementarios.


BIBLIOGRAFIA


BAEZA , S (2005) Funcionamiento y clima socio-relacional del aula. Una perspectiva sistémica. Buenos Aires. Ed Aprendizaje hoy
BAEZA, S (2006) El imprescindible puente familia-escuela: Estrategias E intervenciones psicopedagógicas. Buenos Aires. Ed. Aprendizaje hoy
BROFENBRENNER, U (1987) La ecología del desarrollo humano. Barcelona, Paidos.
DABAS, E (2000) “Red social , sistema familiar y aprendizaje” en Tratamiento Psicopedagógico. Red interinstitucional en el ámbito de la salud. Buenos Aires. Ed Paidos.
KÑALINSKY, E (1999) La participación educativa : Familia y escuela. Zaragoza. Servicio de publicaciones y producción documental de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.


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